Rivas muestra su solidaridad tras la tragedia de la DANA en Valencia
El municipio de Rivas ha mostrado una vez más su compromiso solidario ante el desastre natural provocado por la DANA que azotó Valencia el pasado 29 de octubre, dejando un balance devastador de más de 200 fallecidos. Durante el primer fin de semana posterior a la tragedia, el Ayuntamiento de Rivas habilitó la nave de la calle Fresadora para recibir donaciones de la ciudadanía. Aunque inicialmente se planeó la apertura por tres días, la respuesta superó todas las expectativas, y se cerró un día antes debido al volumen de entregas.
El esfuerzo colectivo permitió reunir una importante cantidad de materiales, entre los que destacaron 39 palés de agua embotellada, 22 de comida no perecedera, 37 de artículos de higiene personal, 10 sacas de papel higiénico y un palé de lejía. Todo el material fue enviado a las zonas afectadas, donde fue recibido con gran gratitud. La Concejalía de Mantenimiento de la Ciudad, Rivamadrid y Protección Civil Rivas colaboraron en la organización y clasificación de las donaciones.
Ayuda directa en las zonas afectadas
Además de la recolección de materiales, un contingente ripense viajó a Valencia para colaborar sobre el terreno. Entre el 10 y el 12 de noviembre, Protección Civil Rivas desplazó seis efectivos, equipados con vehículos especializados y material autónomo, para llevar a cabo labores humanitarias, sanitarias y de limpieza en áreas afectadas, incluidas calles y colegios.
También se unieron al esfuerzo 18 agentes de la Policía Local de Rivas, quienes trabajaron en garajes y viviendas particulares, así como un equipo de 14 trabajadores de la Concejalía de Mantenimiento de la Ciudad. Este último grupo colaboró durante siete días en labores de limpieza y desescombro, apoyando a la Unidad Militar de Emergencias (UME). Equipados con retroexcavadoras, camiones y maquinaria pesada, recorrieron zonas devastadas como Algemesí y Catarroja, que sufrieron graves daños por el desbordamiento de ríos y barrancos.
Testimonios desde el epicentro del desastre
Trabajadores ripenses describieron la escena en Algemesí como «propia de un contexto bélico», con kilómetros cuadrados devastados y una atmósfera de desolación. Su trabajo comenzó en zonas como el barrio del Raval y continuó en Catarroja, donde colaboraron con el Ejército en la remoción de escombros y en el transporte de materiales a vertederos.
En palabras de Víctor Archilla, coordinador del Área de Ciudad Sostenible, el despliegue humano en Valencia fue «abrumador», aunque también enfrentaron retos como la gestión emocional y la inmensidad del territorio afectado.
Un legado de solidaridad
Este esfuerzo reafirma la identidad de Rivas como una ciudad solidaria que, en momentos de crisis como el temporal Filomena o la pandemia de COVID-19, ha demostrado estar preparada para ofrecer ayuda masiva a quienes más lo necesitan. Los responsables insisten en la importancia de mantener el foco en los municipios afectados, que seguirán requiriendo apoyo en los próximos meses.